viernes, 15 de mayo de 2009

sin titulo

Convencidos cada día en la unión del hombre y la naturaleza,
despertamos poco a poco, sin ruidos ni perezas.

El camino es difícil aunque todos te lo vendan fácil.
Los gestos y la memoria salvan,
y aunque digas: “hoy casi”,
de a un poco por día alcanza.
Los principios salvan de la desesperanza,
los codiciosos que aquejan al mundo
con el fuego del altísimo quedaran mudos,
será desvastado el odio absurdo,
y no me basta lo que batís desde la pantalla,
son solo palabras y caricias falsas,
el que todo lo ve no se engaña,
despertará las preguntas entre todo verso
despertará al trueno sanador eterno.
Gente que sueña que no debo, que no puedo,
gente por siglos y siglos de algún modo,
limpiando sus almas en ti creyeron.
Y el que no, bien, aquí los espero,
para compartir el pan y la enseñanza del eterno.
Levantamos el puño en alto, aunque golpeados,
no veras nuestras rodillas sangrando, de pie parados.
El que esta mas allá de las estrellas
nos protege y cuida nuestros pasos.
Miles son los mares que conquisto el mal
uno es el jinete que traerá a la tierra
justicia y dará a cada quien su cada cual.